domingo, 1 de febrero de 2009

Cuanto vale un segundo de mi vida?

Estando en tus brazos o con tu lengua entre mis labios verticales, mis segundos se hacen eternos. Mirando la luna por la ventana y observando como se mueven las hojas de los árboles con el vaivén del viento, mis segundos se hacen agua. Escuchando "Time" de Pink Floyd, consumiendo un Lucky Strike pienso que ese "Golpe de Suerte" es el que me está consumiendo a mí, en ese momento mis segundos se detienen. Cuando vibran mis entrañas y me recorre el orgasmo vía cerebral y hasta la planta de los pies, mis segundos son el cielo. Cuando mis sueños se hacen realidad y me sorprendo que la superan per se, entonces mis segundos se hacen películas del terror más gore que hay. Pisando el asfalto y caminando hacia mi casa con pasos pausados, mis segundos son vitales. Respirando al amanecer y dando gracias al eterno por otro día más, mis segundos son más honestos. Mirando los ojos de un niño, escuchando su voz, su risa y su llanto, mis segundos son extraños. Si me cuestionas un poco, verás que mis segundos son incógnitas. Si me miras de lejos verás que mis segundos son etéreos. Si compartes la comida conmigo, bebes conmigo, coges conmigo, verás que mis segundos no son sólo míos, los comparto contigo. Si me asfixio con mis demonios, mis segundos son sórdidos. Si me mientes y me matas un poco con tu falta de amor, mis segundos son crueles espinas. Si te ves en mi reflejo y no lo comprendes por que está distorsionado, mis segundos son arte.

Finalmente, no me importa cuanto valga una vida, lo que me importa es cuando valen mis segundos y ellos no tienen valor que se cotice en este universo, son más valiosos que yo, por que de ellos me construyo, por que de ellos soy.

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